Asociación Paraguaya de Fútbol

Prosiguiendo con el ciclo de charlas vía videoconferencia, en el tercer capítulo, fue el turno de Delio Toledo, mundialista con la Selección Paraguaya en el certamen ecuménico de Alemania 2006. En este encuentro, el histórico albirrojo compartió con el plantel de la Albirroja Sub 20 sus inicios, su paso por la Selección y su larga trayectoria en el fútbol europeo. 

 

SUS INICIOS EN EL FUTBOL

Delio habló sobre su comienzo en la carrera como futbolista. “Soy de la ciudad de Cecilio Báez, departamento de Caaguazú, por esas cosas de la vida tuve que emigrar a la Argentina con mis padres. Pero después de un tiempo tuvimos que volver a Paraguay, y se me presentó la oportunidad de ir a probar a Atlético Colegiales”.

“Le dije al entrenador que quería jugar al fútbol, y fiché por el club, el apoyo de mis padres fue fundamental, sobre todo de mi papá, que dio el visto bueno con la condición que debía estudiar y terminar la secundaria. Mis días eran: ayudar a mi papá a la mañana, a la tarde ir a las prácticas y estudiar a la noche”, rememoró el ex lateral izquierdo de la Albirroja.

“A finales del año 1996, jugué en la Reserva, hasta que el técnico me subió a la primera. A finales de noviembre debuté en la liguilla. La ilusión del primer día que llegué a jugar, la ilusión que tenía con todos los sacrificios que pasamos, me valió la pena. Al año siguiente comencé la pretemporada con la primera. A los 18 años terminaba el colegio. El mensaje que me dio esta experiencia fue que, si empezamos con sacrificio, perseverancia, vamos a alcanzar nuestras metas”, remarcó el defensor.

Sobre su arribo a Cerro Porteño, Toledo relató: “En junio del 98 llegué a Cerro con la mentalidad fija de llegar a la Selección. Comencé de vuelta a jugar en la Reserva, tenía que demostrar de vuelta mi capacidad, nunca bajé los brazos, y lo demostré debutando en la primera de Cerro en una liguilla, y eso me llevó a estar en la selección”, recordó.

 

CONSTANCIA Y CARACTERISTICAS DE JUEGO

Acerca del estilo de juego y el valor de la persistencia que mostraba tanto en los entrenamientos como en los partidos, él comentó de la siguiente manera: “Siempre fui constante, me gustaba mucho la marca y me gustaba mucho correr, yo sabía mi potencial y mi debilidad, entonces trababa de entrenar más fuerte en lo que yo sabía hacer. Yo trabajé mucho y eso me hizo llegar a la selección. Debuté oficialmente en la Copa América que se jugó en el 99 acá en Paraguay y fue algo impresionante”.

“Lo más importante es tener una buena marca, mirar todas las coberturas que uno pueda hacer, ser rápido y ser muy agresivo en la marca, en el anticipo. A nivel club el que más me costó marcar fue Luis Figo, y a nivel selección era jugadores brasileños. Eran jugadores muy desequilibrantes y muy inteligentes”, afirmó. 

 

JUGAR EN LA SELECCIÓN PARAGUAYA E IR TRANSFERIDO A EUROPA

Toledo tuvo el privilegio de formar parte de una camada histórica de la Selección Paraguaya. “El estar en la Selección y escuchar el himno no tiene precio. La Selección mayor te pone piel de gallinas, les aseguro que es así. Yo ya tenía como compañeros a Francisco Arce, Roberto Acuña, Carlos Gamarra, Celso Ayala, una generación de grandísimos jugadores, que venían de jugar el mundial de Francia 98”, mencionó.

“Lo que yo viví en la selección fue indescriptible, no tiene precio. En la Copa América del 99, se estaba cantando el himno y yo empecé a llorar, el sentimiento de patriotismo que sentí fue impresionante. Nuestro trabajo hoy es mostrarles el camino por donde ustedes pueden seguir para llegar lejos”, sostuvo Delio.

Luego, tuvo el salto de ir al viejo continente y jugar en el Calcio Italiano, fichando por el Udinese para luego pasar el fútbol español. “En julio del 99 ya fui transferido al Udinese de Italia. Lo que a mí me llevó a estar en Europa varios años fue la disciplina. Cuando fui transferido al Udinese me costó un poco adaptarme a lo táctico, pero cuando pasé al futbol español me acomodé más rápidamente”

Delio Toledo recordó uno de sus goles al Real Madrid, en el mítico estadio Santiago Bernabéu: “Hacerle un gol al Real Madrid fue muy particular para mí, festejé más por dentro que exteriormente por la situación que vivía España en ese entonces (Atentado de Atocha en el 2004)”.

 

EL PLUS PARA ESTAR EN LA SELECCIÓN

“Antes que nada, el futbolista tiene que sentir orgullo al entrar al Carde, ser jugador de la Selección, demostrar que están interesados en estar en la selección. Un jugador de la Selección siempre tiene algo más que los demás futbolistas. Vestir la camiseta de Paraguay es un orgullo, es lo máximo y el objetivo siempre tiene que ser llegar a este lugar”, finalizó expresando el ex integrante de la Albirroja.

Delio Toledo debutó en Primera División en el 1996, jugando por Atlético Colegiales. Luego fue transferido a Cerro Porteño. Se estrenó en la Albirroja en la Copa América Paraguay 1999. Fue transferido a Italia ese mismo año, y a partir de ahí permaneció en el viejo continente durante nueve años, militando en diversos equipos como el Udinese, Espanyol de Barcelona, Real Zaragoza y el Kayserispor de Turquía. Fue mundialista con la Selección Paraguaya de Fútbol en el Mundial de Alemania 2006.