Asociación Paraguaya de Fútbol

Dentro del ciclo de charlas con los futbolistas que fueron protagonistas con la Selección Paraguaya, en esta oportunidad fue el turno de Paulo Da Silva, el futbolista con más presencias con la Selección Absoluta con 150 partidos y disputó dos mundiales con la Albirroja. El actual futbolista de Libertad compartió con el equipo técnico y componentes del plantel del seleccionado Sub 20 todas sus vivencias y experiencias como jugador de Selección.

SUS INICIOS

Da Silva comentó acerca de sus primeros pasos en su larga carrera como jugador profesional. “Yo me inicié en Atlántida y llegué a primera en Presidente Hayes. Yo debuté en 1996 a los 16 años, tuve continuidad y luego me fui a Sport Colombia y de ahí pasé a Cerro. Llegué a Atlántida cuando tenía 13 años”.

“Yo siempre fui un jugador de entrenarme a tope, me considero un jugador bueno para un grupo. El hecho de ver que hay un sueño cerca, de jugar con jugadores importantes, se va haciendo realidad en la medida que uno va creyendo. Atlántida siempre me brindó su apoyo para que yo llegue a ser un jugador profesional”, comentó.

 

JUGADOR PROFESIONAL

Uno de los grandes referentes de la Albirroja reflexionó acerca de las enseñanzas que le dejó cada equipo que jugó en su carrera. “Cuando más partido jugás, tenes menos posibilidad de falla. A los 27 años me consideraba ya un jugador muy maduro, todo fue para mí experiencia. Yo siempre fui autocritico, saber si jugaste bien o si no jugaste.  Siempre tuve buenos compañeros”, mencionó.

“Jugar en el exterior me hizo aprender muchas cosas, cosas diferentes, la cultura de cada país; y la manera de jugar en cada país te hace ser un jugador top, porque uno va aprendiendo por la forma de jugar de cada liga. El futbolista paraguayo está entre los mejores cabeceadores del mundo. El saber medir el balón es nuestro fuerte. Hoy por hoy la pelota parada marca la diferencia”, expresó.

 

SU EXPERIENCIA EN LA SELECCIÓN

Paulo adquirió la experiencia de referentes en la defensa de la Selección Paraguaya para luego convertirse en uno de los jugadores referentes de la Albirroja. “Yo tuve la fortuna de estar en las selecciones juveniles, íbamos como sparring de la mayor, lo que mejor siempre hice fue ser respetuoso. Siempre intenté seguir el camino de los jugadores en mi puesto en la selección (Carlos Gamarra, Catalino Rivarola, Celso Ayala). El jugador que se gana un lugar, se mantiene siempre en la selección. Me gustaba verles a ellos como se preparaban para los entrenamientos y los partidos. Lo que mejor hice fue aprender de ellos. Lo más lindo es llegar a ser un futbolista de la selección”, puntualizó.

“Hasta ahora sigo aprendiendo, hay cosas que en el futbol tenes que seguir aprendiendo. Para mí jugar en la selección es todo, jugar por tu familia, por tus amigos. Es lo máximo estar en la selección, te da pirí escuchar el himno antes de un partido”, afirmó el defensor.

Sobre enseñar a los jugadores más jóvenes, Da Silva indicó: “Nosotros lo que intentamos hacer con los jugadores más jóvenes es contarles nuestra experiencia. Uno está en la Selección porque está capacitado, siempre vienen los nervios, y tenemos que lidiar con ello, apoyándonos con los compañeros. Una vez que suena el silbato, se descarga la tensión, lo mejor es apoyarse en un equipo”, subrayó.

 

EL MUNDIAL DE SUDAFRÍCA

Para Da Silva, el mundial de Sudáfrica 2010 fue una experiencia que siempre quedará en el recuerdo no solo por lo hecho en aquel torneo, sino por la unidad que tuvo esa camada de jugadores. “En Sudáfrica teníamos un grupo muy bueno, teníamos a un gran entrenador como el Tata Martino, quien nos decía que podíamos ser campeones del mundo. Siempre fuimos un equipo muy unido, el compañero era lo más importante. Nos fuimos de pretemporada casi un mes. Yo creo que todo al final, estaba hecho para hagamos una gran presentación. El Tata nos cambió el chip de que podíamos jugar de igual a igual a cualquier selección, no podíamos dejar que un compañero se desanime, no podíamos dejar que un compañero se entrene a medias”, resaltó.

“Nosotros sabíamos a lo que jugábamos, siempre hacíamos lo que el entrenador nos pedía, por eso conseguimos llegar al objetivo de clasificar al mundial. Todos íbamos para el mismo lado, y eso hizo que consiguiéramos jugar, y al final nos dolió quedarnos ante España porque estábamos ciertos que podíamos pasar de fase. Nosotros conseguimos tener un muy buen grupo, esa fue la diferencia a la hora de jugar”, sentenció.

 

MENSAJE PARA LOS ALBIRROJOS JUVENILES

Finalmente, el jugador histórico de la Selección dejó un mensaje para los futuros jugadores de la Albirroja Absoluta. “Yo les recomiendo es que disfruten, pero es necesario que quieran estar en la Selección, sean celosos por sus puestos, hay que hacerle el trabajo difícil al entrenador. Disfruten del CARDE, quieran eso como si fuera su casa, no se reprochen nada. Disfruten ese momento, disfruten a su entrenador, disfruten todo lo que rodea a la selección, porque no es un regalo, es por ser un jugador diferente. Lo mejor es siempre que la selección crezca”, finalizó.